domingo, 5 de septiembre de 2010

RELACIONES CONGRESO GOBIERNO, LEY DE TIERRAS Y DISTRACTORES POLÍTICOS


El gobierno Santos tendrá un estilo realista, pero es “demasiado” pragmático y poco utopista, pues hay mucho del ser y poco del deber ser. Tiene tanto de liberal y demócrata, como de poca tendencia a los cambios que requiere el país. Cuenta con un Ministerio del Interior lleno de frases,, pero con pocas propuestas legislativas fuertes. Hay más Ministro de Agricultura que ambiciosas políticas de tierras. El Ministerio del Medio Ambiente tendrá más de empresa ecoturística que de epicentro de políticas y normativas de un Estado que busque la sostenibilidad en el campo y la urbe. El gobierno tiene un buen Ministro de Hacienda, pero poco de innovadoras ideas para convertir el erario en locomotora de las “cuatro locomotoras” del Presidente. Se ven hace un mes, e incluso antes, mucho de acercamientos mediáticos y amistosos con la rama judicial, pero poco de intenciones en reconocer su autonomía.

Otro elemento fácilmente identificable del gobierno en curso es querer dejar al albedrío de los debates en el Congreso los proyectos de ley y la suerte de las realizaciones importantes. Es un gobierno más administrador que gestor, que erróneamente deja al juego del lobbying congresional la suerte de medidas profundas, que no pasarán, para centrarse en la gerencia de comercio externo, en la administración de relaciones públicas con los medios y en la asistencia a las regiones, con menor frecuencia que su antecesor, tratando de mantener pulida la imagen política que se desea dejar para la historia.

Será un gobierno de distractores. La ley de tierras va encaminada solo a destrabar algo que suma unos dos millones de hectáreas respecto a los quince millones que se encuentran en esta situación de “legalización” apropiada por los grupos extremistas, tras el proceso de desplazamiento más aterrador que han vivido la historia y el mundo (14,3% del total de los desplazados mundiales a 2010). Las propiedades en manos de la Dirección Nacional de Estupefacientes representan no más que medio millón de hectáreas (un 3,3% de las que se encuentran apropiadas indebidamente y sin explotación) que, en el mejor de los casos y luego de demagógicos y largos debates de senadores y representantes, serán luego repartidas en un teatro miserable de consuelo masivo a unas pocas familias agradecidas, dejando de nuevo engañado al país.

El periplo legal de tierras, del cual no ha quedado cambio estructural alguno, se puede resumir en Ley 200 de 1936, Ley 100 de 1944, Ley 135 de 1961, Ley 1ª de 1968, Leyes 4, 5 y 6ª de 1973, Ley 35 de 1982, Ley 30 de 1988 y Ley 160 de 1994, así:

Ley 200 de 1936, explotación económica de los predios de manera obligatoria, derecho de dominio sobre los mismos o su restitución al Estado, derecho de los trabajadores rurales a las tierras
Ley 100 de 1944, contrato de arrendamiento y de aparcería son de utilidad pública y de diez a quince años causal de restitución al Estado de los predios no explotados
Ley 135 de 1961, creó el Comité Nacional Agrario, partidos políticos, Congreso, Iglesia y Fuerzas Armadas para adelantar el proceso de reforma agraria en dotación de tierras a campesinos carentes, adecuación de tierras para ponerlas a producir y dotación de servicios sociales básicos. Creación del INCORA y otros organismos agrarios.
Ley 1ª de 1968 de Arrendatarios y Aparceros, nuevos causales de expropiación, reglamenta la Unidad Agrícola Familiar, UAF, a fin de proteger y regular la tenencia y explotación de las porciones de tierra distribuidas individualmente a los campesinos beneficiarios, principalmente en lo relacionado con su venta o transferencia.
Ley 4ª de 1973, reducción de trámites de adquisición de tierras mediando negociaciones directas, establecimiento de la renta presuntiva agrícola para penalizar su apropiación improductiva.
Ley 5ª de 1973, sistema de financiamiento para el agro con el Fondo Financiero Agropecuario.
Ley 6ª de 1975 aparcería, reformó la Ley 1ª de 1968.
Ley 35 de 1982, dentro de la ley de amnistía el INCORA dota de tierras y provisión de otros servicios a las personas indultadas.
Ley 30 de 1988 que en términos generales reglamenta procedimientos generales a todo lo anterior.
Ley 160 de 1994, dinamiza la redistribución introduciendo el concepto de propiedad a través del mercado de tierras, mediante un subsidio para la compra directa por parte de los campesinos facilitando la negociación directa entre propietarios y campesinos.

Por otra parte, la discusión sobre la macroeconomía de la tierra y la propiedad de la misma solo ha dejado claro que:

1% de los propietarios es el dueño de casi el 60%, 27 millones de has.
67% quizá dedicada a la ganadería, unos 30 millones de has.
33% de la tierra es cultivable, 15 millones de has.
5,1% (0,8 has) se dedica al cultivo de alimentos, 28,2% (4,2 has) a otros cultivos y 66,7% (10 has) está sin cultivar.
55 % de la comida se cultiva y cría en el 1,7% de la tierra y el resto de alimentos 45% es de origen importado.

El Ministro agrícola es el encargado de arreglar el tinglado para unas medidas mínimas que hay que maximizar políticamente, distrayendo al público que asiste a ver obras sobre “resarcir víctimas y propiedad contra la pobreza y el hambre”, de las cuales lo único que quedará dentro de cuatro años es recordar a Gabo:

“y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra”

sábado, 4 de septiembre de 2010

SON COMO NIÑOS (GROWN UPS)


Dirige Dennis Dugan. Pero son Adam Sandler, Kevin James, Chris Rock, Rob Schneider y David Spade, que han sido amigos siempre, no solo dentro de este argumento jocoso, sino en su vida profesional hollywoodense, quienes orientan el filme. Por ello es que esta película pareciera no tener un guión desarrollado sino un simple “storyboard” (escrito por Adam Sandler y Fred Wolf) al que se apegan todos con facilidad.

Es un filme dentro de la tónica de crisis en el cual se conjugan varias personalidades reconocidas como estrategia de mercadeo. Llama la atención que US$80 millones se tripliquen en el mercado gringo hasta el momento.

¿Cuál es el secreto del éxito de este tipo de películas? Probablemente su sencillez, su lenguaje literario y visual plenamente llanos, su falta de pretensiones de autor.

No cabe duda que es Sandler la constante de alto valor en la ecuación. A él se le suele confundir con su competidor en el cine masivo que es Ben Stiller, aunque este último parece depender de la infraestructura a su alrededor (su éxito reconocido se ha dado en las dos historias sobre los “Fuckers” con De Niro). Las comparaciones serán siempre odiosas y las preferencias siempre dependientes de gustos. No obstante sirven en este caso para entender que Sandler depende menos de la producción a su alrededor y sus temáticas han podido combinar la comicidad con la profundidad, como en “Locos de Ira” con Jack Nicholson, “Como si fuera la primera vez” con Drew Barrymore, “Spanglish” con la despampanante Paz Vega y “Click, perdiendo el control” con Kate Beckinsale.

Acá la historia no es de adultos inmaduros, como se sugiere, sino de una pequeña justificación para no perder nunca el niño que llevamos dentro.

Por ahora, el marcador Sandler vs Stiller podría ir como en 5-3 y contando.

LA HERMANDAD (DAYBREAKERS)


Dirigen los Spierig Brothers (Michael y Peter), quienes también realizan al alimón el guión acerca de una sociedad hematofágica ficticia en la cual los humanos son criados para industrializar su sangre en un mercado de vampiros sedientos. Protagonizan Ethan Hawke (“Training day” y Gattaca”) como Edward Dalton, vampiro con consciencia, el excelente Willem Dafoe (“Spiderman”, “Mississippi burning”, “The last tempation of Christ”, “”Platoon”) es Lionel 'Elvis' Cormac, el casual descubridor de la cura para la fotofobia de los vampiros y Sam Neill hace Charles Bromley (“Jurassic Park III”, “Merlín”), el “blood industrial” representación del mal en este film.

¿Cómo evitar la combustión de un cuerpo eterno a la luz del día? Elvis tiene el secreto y Edward desea difundirlo en la sociedad vampírica, acabar con los hatos de humanos y su esclavitud. Una hipótesis para atraer a la taquilla, sin lograrlo de forma suficiente. Cine adolescente dentro de la tónica actual de “diversificación” de la historia primigenia de Bram Stoker.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Pastilla del empleo en Colombia 2010


Mill. de
Personas
12 a 65 años Clasificación
7,34 equivalentes a 34,2% Desempleo subjetivo
2,79 equivalentes a 13,0% Desempleo objetivo
2,70 equivalentes a 12,6% Desempleo, tasa de
8,63 equivalentes a 40,2% Empleo, Tasa de ocupación
21,46 equivalentes a 100,0% Población económicamente activa

45,68 equivalentes a 47,0% Población total
24,22 equivalentes a 53,0% Población dependiente

El total de la población desempleada es de 2,7 millones (12,6%) El total de la población subempleada en trabajos formales e informales es de 7,34 millones (34,2%)

Son subempleados quienes creen que su remuneración es insuficiente, o su trabajo está por debajo de sus capacidades, o no trabajan el tiempo suficiente.

Los subempleados subjetivos no hacen gestiones para encontrar otro trabajo.

Los subempleados objetivos si hacen gestiones para encontrar otro trabajo.

La población económicamente activa en Colombia es de 21,46 millones y sus edades oscilan entre 12 a 65 años en la zona urbana, en la zona rural es de 10 a 65 años.

domingo, 29 de agosto de 2010

LA CIUDAD DE LAS TORMENTAS (GREEN ZONE)




La “Zona Verde” es un lugar cierto y significa el punto más seguro en la ciudad de Bagdag, luego de la invasión de Iraq en marzo de 2003. Esa guerra de intervención, que en teoría acaba de finalizar en el presente mes con el retiro parcial de las fuerzas norteamericanas.

En esta área verde de la capital iraquí se instaló la Autoridad Provisional de la Coalición, epicentro de presencia occidental. Era la zona en la cual estaban ubicadas antes de la invasión las villas de los funcionarios, los ministerios del gobierno y algunos palacetes de Saddam Hussein y su familia, además del Palacio Republicano, principal sede suya, usada para recibo de mandatarios extranjeros.

Brian Elgeland hace el guión (“Robin Hood” 2009 y “L.A. Confidential” 1997, son sus historias más recordadas) y Paul Greengrass dirige, como experto en el manejo de escenas que han revolucionado el cine denominado “de acción”, con la saga de Jason Bourne (“Supremacy”, “Ultimatum”, pues “Identity” es de Doug Liman) que ha innovado con los movimientos en extremo ágiles de cámara en las tomas de lucha cuerpo a cuerpo, los saltos edificio a edificio y las persecuciones auto a auto. Las novelas Bourne fueron escritas por el muy exitoso Robert Ludlum, fallecido en el 2001 a los 73 años, dejando una cincuentena de historias de espionaje político, entre las cuales quedan aún unas cinco más no filmadas de la serie en mención.

Esta referencias son útiles para destacar en “The Green Zone” el tipo de acción y el argumento político. El espectador debe tomarla en serio y poner especial atención a su contenido, de aparente ficción. Este argumento de la titulada como “La ciudad de las tormentas”, trata de Roy Miller (Matt Damon), un oficial americano encargado de buscar las supuestas armas de destrucción masiva que justificaron la invasión. En el film, Miller se da cuenta que hay verdades y mentiras combinadas, creadas por el gobierno de su país dentro de una estrategia de defensa preventiva y ofensiva llena de intereses políticos. La gran maquinaria de la potencia bélica se une a la guerra mediática y la intervención de intereses de empresas monopólicas de toda índole.

Esta película apuesta por una fuerte crítica al sistema político e informativo norteamericano con la hipótesis de que quizá nunca hubo armas químicas desarrolladas por Sadam y el país invadido es un chivo expiatorio de todas las falsedades republicanas para controlar petróleo al otro lado del mundo, contener otras fuerzas en la zona y desatar un generoso mercado nacional y global de armas.


“La ciudad de las tormentas” tiene como asesores de su producción a expertos militares y veteranos de Afganistán e Irak. El espectador debe jugar a tomar en serio todo lo que allí se dice para hallar una coherente explicación a una de las más costosas e injustas invasiones, desatada por el gobierno Bush para justificación de lo que en la historia geopolítica quedó como ejemplo del concepto seudoimperial de “guerras preventivas”.

CEREZOS EN FLOR (CHERRY BLOSSOMS) (KIRSCHBLÜTEN-HANAMI)



Doris Dorrie confirma la ley de Zam, en la cinematografía: quien escribe el guión y luego lo dirige asegura autenticidad, alcanza altos niveles de creatividad y la recordación del público.

Trudi (Hannelore Elsner) sabe que su marido Rudi (Elmar Wepper) está enfermo de cáncer y lo invita a visitar a sus hijos en Berlín. A Rudi no le ha bastado con promulgar y practicar que “una manzana por día mantiene al doctor alejado”. Deja las rutinas del Departamento de Gestión de Desechos, un título organizacional que denota administración ecológica y reciclaje tecnológico, pero que, como uno de sus hijos expresará adelante en el film, significa simplemente “tus camiones de basura”.

La pareja visita, cansada, a Claus y Karolin, dos de sus hijos, pues Karl trabaja en Japón. Este par de adultos mayores ha aceptado ciertos modernismos, pero no otros, y junto a su comprensión del amor lesbo de Karolin con Franzl, no comprenden aún el manejo del celular. Trudi prepara exquisitos rollos de lechuga, “eggs rolls”, consiente a su marido y le acompaña un tanto de manera desorientada al comprender que sus hijos están muy ocupados con sus vidas para dedicarles tiempo en su visita, luego de años de alejamiento. Han envejecido y no les comprenden bien. Sorpresivamente, muere Trudi dejando a Rudi desolado. Decide viajar a Tokio donde Karl, su otro hijo, un ocupado trabajador de la gran máquina japonesa engranada en rascacielos de vidrio, quien solo puede alejarse de su día tras día, adentrándose en su pequeño apartamento, al cual su padre irrumpe importunándole. Rudi sale en el día, deambulando vestido con algunas ropas ocultas de Trudi para “llevarla a ver la ciudad que siempre quiso”.

Rudi recorre calles dejando pañuelos anudados al frente de su edificio para no perderse, obnubilado con las luces de neón de la gran ciudad se adentra en los lugares nocturnos, topa con los lugares de chicas “hentai”, los masajes y baños nudistas, pero llora ante el recuerdo de su pura esposa. Topará con el Festival de Cerezos en Flor y con Yu en medio de este, se apegará al Butoh, ese baile con la sombra, que incluso su hijo desconoce o no aprecia. Yu, la bailarina callejera puede rememorar a su madre muerta hace un año, danzando, y ayuda a que Rudi pueda hacer lo propio con el recuerdo de la esposa. En este punto del filme, la danza Butoh, tradicional japonesa, expresionista y mimodramática del dolor, es homenajeada por la directora Dorrie, incluyendo una performance del bailarín Tadashi Endo, y la hará central para la catarsis de su personaje masculino.

Yu vive una vida mísera pero feliz, bajo una carpa de plástico y entrega a Rudi su filosofía de vida y de elaboración del duelo personal. Llena unos días acompañándole a visitar el tímido y emblemático monte Fuji que, día tras día, se esconde a los turistas tras el velo de la niebla baja. Sin embargo, alguna madrugada se deja ver de Rudi, quien danzará butoh a la vista majestuosa del nevado, pudiendo abrazar en su recuerdo una vez más a su amada Trudi, pues “mis memorias de ella están en mi cuerpo”, y fallecer feliz en la costa de mar frente al “Señor Fuji”.

Una frase ambivalente de los hijos de Rudi “! no se explica cómo estaba vestido de mujer y acompañado de una adolescente de 18 años¡” es antecedida del ritual de cremación llevado a cabo por Karl y Yu, palillos, huesos y cenizas al cofre mortuorio.



En la superficie, “Cerezos en flor” hace turismo por Berlín, el Báltico y el Japón. En lo profundo, esconde las penalidades de la edad mayor, que han preocupado mucho en la filmografía mundial. Hay contraste fuerte de la “esclavitud” del trabajo y el consumo, con la incapacidad del individuo en asumir la vida en la vejez y la pensión inútil. Hay alienación y enajenación, vital y laboral. Al paso, el amor se confunde con el lleno del vacío personal y el ocio con la inutilidad plena, todas problemáticas psicosociales que preocupan a la literatura y al cine, sin alcanzar respuesta práctica. El vacío, el apego, la enfermedad, la muerte y el duelo posterior seguirán siendo incomprensibles a toda razón que, siguiendo a su sombra, llegará, inefable, a la muerte.

sábado, 28 de agosto de 2010

EN EL SÉPTIMO CIELO (WOLKE 9)


Andreas Dresen había enviado previamente a la cartelera colombiana “Whisky y Vodka” y “Verano en Berlín”, bajo su dirección. Ahora “Nube 9” o “En el Séptimo cielo” , hace referencia a una especie de paraíso personal en el cual las necesidades han desaparecido en un ámbito de dicha y satisfacción, el éxtasis de la dicha absoluta aparece. ¿Es la adultez esta novena nube? Es posible. Se gana serenidad, plena tranquilidad consigo mismo y los demás, usualmente, y se goza de los pequeños placeres. Si a ello se le agrega, de nuevo, el retorno del sexo, pues se está “en el séptimo cielo”. La nube nueve augura males en el Japón y suertes en la China, pero es la cábala del 666 que sumados llegan a este dígito. Hay cielos o infiernos en estas cifra mágicas dependiendo de la cultura.

La momma Inge de 62 años tiene una aventura “juvenil” con un hombre “mayor que ella” de 76 años, hasta aquí siete cielos o novena nube. Su esposo desde hace más de treinta años lo sabrá por confesión de ella misma y todo cambiará para los dos, llegando al borde celestial de la última nube: allí el vacío.

Inge es corista y el summun de su felicidad se refleja en un corte cantado en grupo con las otras coristas de tercera edad, en la Oda a la Alegría de Schiller en el 4º. movimiento de la novena sinfonía de Beethoven.

Dresen fotografía desnudos a todos estos adultos mayores. Las cejas superiores descendidas por los años, las pieles moteadas por la edad, las cabezas canas y las caras surcadas. Pero hay atracción aún, desespero hormonal, recuerdos excitantes, nuevas búsquedas y el retorno de fluídos vitales a los escasos músculos ya un tanto desligados de sus propias pieles. Los peinados y cosméticos no contribuyen a algún coqueteo que ya no es de esperar, pero la química circula al interior de lo que fue alguna vez más bello.

El Dogma 95 (Lars von Trier - Thomas Vinterberg) trascendió de Alemania al mundo. Ya no es una moda ni menos una vanguardia, ahora es un lenguaje audiovisual más, disponible a gusto de los autores. Cámara al hombro en movimientos comprensibles para el espectador, sin cuidar las luces, pues al entrar a un cuarto no importará el oscuro pleno, ni lo que ello dure.

Estos vacíos de luz y de sonido hace parte de la estética minimal y naturalista también en la historia de Inge, Werner y el osado Karl, en la cual Andreas Dresen, con sus 47 años, se da el derecho de sellar su filme con alguna llama castigadora que nadie esperaba.

ALMAS PASAJERAS (PASSENGERS)

Rodrigo García, colombiano e hijo de Gabo, 51 años, es un director de TV (es su fuerte, en HBO). En el cine, con “Cosas que diría con sólo mirarla”, “Nueve vidas”, “Passengers” y vendrá “Mother and Child”, solo ha demostrado que es un técnico, no un autor. Sus películas reúnen elencos importantes, utilizan tecnología de punta y son editadas bajo esquemas académicos, pero son elegantes productos, sin suficiente alma, realizadas al gusto de los productores.


En “Almas pasajeras” se adentra en el manido tema de los espíritus que no quieren irse luego de que el cuerpo muere y en las relaciones novelescas entre este y el “otro mundo”. Pero hay muy buenos novelistas y “filmakers” que han tocado de manera notable el tema (Shiamalan, Amenábar… y una larga lista) y por ello es difícil llegar a impresionar una vez más.



“Passengers” juega con la idea de que la vida es pasajera y que los muertos desean comunicarse con la psicóloga de turno, Anne Hattaway, uno de los cuales, Patrick Wilson, resulta con un poder de comunicación sobrenatural, luego de un accidente aéreo por una falla de fabricación que alguien desea ocultar y que las almas no difuntas querrán que se sepa. Anne es la carita sorprendida que saltó a la mirada mundial principalmente con “El diablo se viste de Prada” y Patrick es el Búho de “Watchmen”, dos películas recomendables cada una en su género.

Pero acá, eso es todo. Aunque la película alcanza a entretener.

García Barcha podría intentar alcanzar la “Ley de Zam”: quien escribe el guión que también dirige, tendrá éxito. Es posible que tenga algo de imaginación si lo intenta como guionista y que pueda utilizar sus destrezas técnicas de academia (Harvard y American Film Institute) en hacer buen cine. Por ahora, dirige por encargo este tipo de películas “pasajeras”.

viernes, 27 de agosto de 2010

“CHERÍ” (y “El Fin de Cheri”)





Colette (Sidonie Gabrielle Claudine Colette) escribió estas dos novelas y otras 15 más, dejando su nombre para la posteridad también en champañas y perfumes. Escritora insignia de la “belle epoque”, fue miembro de la Academia Goncourt a los 72 años y habitante eterno del cementerio de celebridades y monumento nacional Pére Lachaise, Dejó personajes memorables en su literatura como Claudine, Gigi y Cherí, además de
muchas frases memorables, una de las cuales viene a cuento: ”Hay menos maneras de hacer el amor de lo que se dice, pero más de lo que se cree”.

Este guión conjuga dos novelas sobre el joven Cherí, bien interpretado por Rupert Friend (29 años, recordado en “Pride & Prejudice”), el “bon vivant”, hijo de meretriz opulenta, que cae enamorado de una “vieja prostituta amiga de su madre” de 52 años, protagonizada por Michelle Pfeiffer (sobra rememorarla de “Scarface” o “Batman Returns” como CatWoman) como siempre muy suficiente en su rol. Cathy Bates es Madame Peloux, la amiga y, sin saberlo, “suegra” de Léa, de una manera muy ingenua y poco convincente.

Dirige Stephen Frears (70 años), quien comenzó como asistente en la recomendable “If...” de Lindsay Anderson en 1968, aquella historia de una alegórica revolución en una escuela secundaria con Malcom McDowell (el Alex DeLarge en “Clockwork Orange”) y que, luego en el 2006 filmaría “The Queen”, con Helen Mirren como su inolvidable Isabel II.

Las producciones fílmicas “de época” justifican el precio de la boleta, aunque quizá lleguen a poder ser catalogadas un tanto de aburridas. Su valor reside en convertirse en documentos cuasihistóricos. En este caso el referente es la “bella época”, más que por hermosa, por añorada, luego de la Primera Guerra mundial. Se gozaban las nuevas tecnologías de comunicación fotografía, telégrafo, teléfono y recientes revoluciones urbanísticos como el tranvía o la torre Eiffel, circundados por el “art Nouveau” en todas las expresiones sociales. Se expandió la moda universal de las exposiciones industriales en las grandes ciudades, pero también en las muy pequeñas con ínfulas de “city”. En Bogotá, el parque del Centenario albergaría la exposición Agrícola Industrial de 1910, de la cual queda el pabellón de “La Luz”, una de las primeras construcciones republicanas con base en cemento nacional.

Cherí personifica bien la teatralizada moda francesa y los matrimonios de conveniencia, el disfrute de los recientes automóviles, la práctica del box “aeróbico” y el ocio bien visto. Pero también, sin ser poeta, ni adicto a las drogas, sufrirá la suerte de Verlaine, Mallarmé o Rimbaud, quizá “maldito” … por el amor de Léa.

El Metro de Bogotá y el General...

No es de costumbre en este blog citar opiniones ajenas, pero en este caso se debe hacer una excepción. Acerca del tremendo error ciudadano que es llevar a cabo el proyecto Metro en la capital opina en el periódico El Tiempo de hoy, quien abajo firma:

"De las cifras, no del comentario de Peñalosa, que podría considerarse desfigurado por razones políticas, se deduce que a Bogotá la dejó el metro como solución de su agudo problema de movilidad urbana. Los costos comparativos con el TransMilenio son de tal magnitud, que sería necio persistir en la idea obsesiva del tren subterráneo. Lo que la lógica aconseja ante semejante realidad es concentrar todos los esfuerzos en la ampliación del TransMilenio, incomparablemente menos costoso, más rápido de construir y con más del doble de capacidad transportadora por trayectos similares. La Nación ha fijado ciertas condiciones para aprobar el empeño bilateral. Importante verificar si las condiciones se cumplen o simplemente se allanan sobre cálculos optimistas, que resultan superados billonariamente por la realidad, los sobrecostos, el engordamiento de bolsillos ajenos, los interventores que no intervienen, en fin, las mil maneras de defraudar a los gobiernos, que los protagonistas conocen mejor que nosotros".

"Conclusión: si el propio Secretario saliente de Hacienda descalifica el metro, aun sin proponérselo, los ciudadanos no podemos dejárnoslo embutir a la brava. De aceptarlo con resignación de borregos, estaremos prohijando la crisis que ciudad, nación y nuestros hijos habrán de sufrir en un futuro cercano".
alvatov2@yahoo.com
Álvaro Valencia Tovar

Sin embargo,habrá que aceptar que política y democracia suponen que los mecanismos previstos de todo orden, electoral administrativo, jurídico y presupuestal, den curso a las decisiones que pasan por las instancias primarias para ser ejecutadas por las gestionarias. El Metro se está "colando" como una irracional decisión gracias a la deshonesta propuesta del Polo y a la necedad de los funcionarios de turno en desconocer a la academia, los expertos, las cifras y, en general, la realidad y la razón.

Ver "Pastilla y sorbo amargo del METRO en Bogotá" más abajo en este blog

miércoles, 25 de agosto de 2010

EL ESCRITOR OCULTO (THE GHOST WRITER)



Los créditos

Robert Harris, es un decidido “bestsellerista”, de aquellos cuyo nombre aparece en letras de mayor tipografía que el título de sus novelas. Escribe un nuevo libro cada tres años y sus títulos (Patria, Enigma, Arcángel, Pompeya, Imperio, Conspiración) son sencillos y atrayentes.

Harris escribe “The Ghost”, un thriller político muy cercano a su conocimiento personal y admiración por Tony Blair, exprimer Ministro del Reino Unido (1997-2007) y su esposa Cherie. No siendo una acusación a estas figuras, ni mucho menos, si toca elementos políticos que Harris mismo considera sensibles pues comentó, antes de la publicación, tener temor a mandatos judiciales.

La puesta en escena es del genio Roman Polanski, quien también coproduce y participa del guión. Ewan McGregor (“Star Wars”, “The Island”, “Moulin Rouge”) es el “aparente idiota y algo divertido” que comenta la esposa del político. Pierce Brosnan (junto a Sean Connery y Daniel Craig, uno de los 007 que resultaron inteligentes actores) es Adam Lang, el político que desea ver publicadas sus memorias reescritas por el nuevo “ghostwritter” que reemplaza al anterior, posiblemente asesinado.

Kim Cattrall (“Sex and the City”) es ese bombón de 58 años, la perfecta secretaria eficiente del protagonista. Olivia Williams (“An education”) es la esposa, nada que ver con la caritativa, liberal y socialdemócrata Cherie Blair de la realidad. James Belushi (calvo irreconocible), Timothy Hutton (ganó un Oscar a los 20 años en “Ordinary People”, nada más) los acompañan rápidamente, Tom Wilkinson (“Michael Clayton”, “Cassandra´s Dream”) es un rol clave, pero corto. Eli Wallach, con 95 años de edad, despierta simpatías para quienes lo reconozcan como el Don Altobello de Padrino III o, mucho más, como “Tuco” el feo en “The good, tha bad and the ugly”.
El músico Alexandre Desplat hace bien su tarea (tiene tres nominaciones y dos premiaciones por cada año en toda su carrera).

LA TEMÁTICA

Roman Polansky, francés de ascendencia polaca subjudice por gustar de las jóvenes, lanza cada tres años desde 1965 una película de culto, aunque dirige desde 1955. Es un maestro del lenguaje cinematográfico, sin trucos, sin grandilocuencias, sin pretensiones. Sus películas son inteligentes.

¿Qué hay de Polansky hoy en día? Seriedad en llevar a la pantalla las ficciones. Con el escritor oculto no sorprende, pero gusta. No requiere evolucionar pues, como director, está fuera del bien y del mal. Pero, gracias a Harris, se actualiza y se adentra en una temática que comienza a interesar a la industria cinematográfica: la incidencia de la Corte Penal Internacional.

La CPI es un “cuero de tigre” que, hasta ahora, en consenso 110 países firman pero solo 60 han ratificado. Es una entidad que se usa para argumentar con demagogia por ahora pues solo un par de casos se han hecho realidad, contra los gobernantes de turno. La CPI tiene más cuero que dientes. El Estatuto de Roma, sin embargo, es uno de los ordenamientos del Derecho Penal que más trascendencia ha de tener en el mediano y largo futuro.

En “The Ghost”, Adam Lang es acusado de responsabilidades en la aprobación de vuelos de tortura, de violación de los derechos humanos y crímenes de guerra. Es llamado por la CPI y rechazado por los que fueron sus votantes. La historia lo enjuicia. Pero, ¿cuál es la relación de Lang con la CIA? ¿Es su marioneta política en Inglaterra? Solo después de que las memorias se publican, el escritor oculto lo descubrirá, a través de una estereotipia de codificación que había en el borrador a corregir y … la calle se llenará de hojas sueltas llevadas por el viento.

martes, 24 de agosto de 2010

LOS “VEDETTES” DE LOS DERECHOS HUMANOS Y DEL DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO

Un país en conflicto interno, ese término de la teoría política para denominar lo que es una guerra interna, genera invasiones crónicas del lenguaje, ocasiona gastos inútiles enormes que van desde la obviedad del enorme costo de la guerra y de mantener un pie de fuerza que viene a ser el 5º mayor de un mundo conformado por cerca de 198 naciones, hasta enfocar la atención nacional en temas que han probado ser infructuosos.

Nazih Richani, en su estudio sobre Sistemas de guerra, en el 2003, expresaba que un “sistema de guerra”, algo muy diferente a una economía de guerra, se forma bajo tres condiciones claves que son la precariedad o fracaso de los sistemas institucionales adecuados para la tramitación de conflictos, las perspectivas de éxito de las partes desde el ángulo económico que convierte a la guerra en mejor alternativa disponible frente a los costos de la paz y el establecimiento de un equilibrio, o “cómodo impasse”, entre los contendores. Este cómodo impasse es una especie de empate negativo. En Colombia, la subordinación del aparato militar al poder civil, más clara a partir de 1991, no generará golpes de Estado al estilo de los años sesentas, ni cambios radicales en el régimen sino una preeminencia militar en los asuntos del gobierno. Un Ministro de Defensa resulta más “vedette” que un Ministro de asuntos sociales (Trabajo, Salud, Hacienda…). No obstante los altos costos del impasse, la economía política se ha vuelto negativa, lo cual no significa en modo alguno que ello signifique un campo abonado para las negociaciones de paz.

Pero el impasse sigue siendo cómodo. Por ello, un Presidente guerrerista gana los mayores puntos de popularidad de la historia al lado de los malos indicadores sociales. Las universidades recuperan finanzas con la puesta en el mercado de programas de Relaciones Internacionales, Solución de Conflictos y una gran gama de titulaciones relacionadas con el tratamiento de los temas jurídicos en combinación con los de guerra y paz. Las áreas sociales de menor perfil “vedette” estudian los impactos del conflicto en la infancia, en la salud, en la psiquis. Otros programas miran hacia la inseguridad y el delito que tienen imbricaciones con “las violencias”. Dejaron los expertos de denominarse “violentólogos” para continuar siendo analistas "vedettes" del entorno del conflicto.

Es así como, las planas de los periódicos y las pantallas de televisión se llenan de referencias a la violencia cierta de los actores de la guerra estatales, privadas, comunes y demás. Es asi como se escriben y se hace discurso "gurú" de la ciencia de la violencia en todas su formas y en constante desarrollo, sin praxis alguna.

Y en esta vía, aparecen las vedettes periodistas en "cómodo impasse", es estado de latencia que resulta generando réditos a todos los participantes. Las y los columnistas de mayor figuración serán aquellos que comentan, contribuyendo a encender el debate “académico” y las discusiones de lobbying parlamentario. Tratar del tema del conflicto y todos sus componentes políticos, sociales, jurídicos e internacionales darán pantalla. El universo mediático y académico se llena de vedettes que son “gurús” caracterizados por un lenguaje mezcla de tratados densos.

Pero la práctica estudiosa, la persistencia del fenómeno y la destreza en el tema, hacen maestros. Basta con escuchar debates televisivos, leer artículos destacados, observar docentes profundos, para captar la superficialización constante y total del tema original en concordancia con la germinación de esa serie de “famas”, “popularidades” y “prestigios”, que adornan a políticos, periodistas, docentes y tomadores consuetudinarios de tinto en los Juan Valdéz, Omas y demás. Cortázar hablaba de los "famas y los cronopios", de los cuales faltan hoy muchos de los segundos.

En este camino es que el escenario de la guerra interna más larga de la historia contemporánea, que provoca el 14,3% acumulado de los desplazados forzosos de todo el mundo actual, tiene cada vez más vedettes del conflicto.

En el país la ignorancia de habilidades políticas y sociales de democratización de la riqueza en pro de la eliminación de indicadores como los de 60% de pobreza, 25% de miseria, 15% de desempleo y 33% ponderado de informalidad en todos los órdenes sociales, se ha sustituído hace décadas por el camino fácil del mercenarismo, la defensa privada, el paramilitarismo, la guerra sucia y los falsos positivos.

Pero, al escenario cuatrienal debe ascender una figura que bajo promesas y esfuerzos mediatizados por las pantallas, permita la continuidad del “cómodo impasse” que genera mercados bélicos, industrias de guerra, instituciones temáticas y organizaciones especializadas en esa realidad que hay que “aceptar y aprender”. Y es en ese escenario donde rampantes circulan los periodistas estrellas,los gurús académicos y las carreras políticas impulsadas por ese execrable e inútil “vedettismo” experto en los temas de la muerte y analfabeto en la búsqueda de la felicidad compartida, dado el escenario de cómodo impasse que favorece sus dudosos brillos.

domingo, 22 de agosto de 2010

AGENTE SALT


Phillip Noyce, de 60 años, dirige este film de “acción”. Se le conocen “El coleccionista de Huesos”, “El Santo”, “Juego de Patriotas” entre las más sonadas películas bajo su dirección.

Angelina Jolie (Salt) permitirá que el costo de US$110 millones se recupere en taquilla. Sin embargo, el público irá a verla a ella, pero difundirá el rumor de que este producto cinematográfico es intrascendente, afectando su estadía en taquilla.

Gran parte de las películas con trama de espionaje y el mundo en peligro, comienzan ahora con una tortura del, o la, protagonista. Esto desde que a Pierce Brosnan se le tortura al límite como James Bond en en el comienzo de “The worl is enough” (luego lo harían con Daniel Craig casi al final de “Casino Royale”).

El método

Los sufrimientos del héroe son ahora parte vital de la credibilidad del cine. Antes, quien era derrotado en un argumento fílmico era calificado como “antihéroe”, hoy esto se hace imprescindible. Además, en el lenguaje fílmico, el héroe actual debe estar involucrado personalmente mediante el amor o con sentimientos patrióticos, pues de alguna manera el “establishment” estará en peligro o la “ética” empresarial será amenazada por la “mafia” corporativa.

Esto significa que en la etimología del cine masivo Estado, Capitalismo o Corporación significan “grande”. Y que “dolor” y “amor” significan “pequeño”. De esta manera, estando lo pequeño en el rol principal de un discurso que llevará a la defensa de lo grande, se logrará mediante un método inductivo que el público vaya de lo particular a lo general, dando relieve a los grandes valores que deben defenderse. El cine busca cimentar el statu quo con lenguaje directo y señas subliminales.

El héroe y el viaje intertextuales

Salt es torturada, se enamora, ha sido incubada por los rusos, ataca el poder norteamericano pero, finalmente, lo estará haciendo para proteger al mundo de la amenaza de una guerra global desatada por oscuros intereses comunistas manipulando al presidente gringo atrapado por quien menos se imaginará uno, solamente hasta el climax final.

La teoría intertextual lee al héroe y los viajes plenos de peligros en su camino, como los motivos de toda narración de este estilo. Acá, se produce un largo viaje representado por persecuciones infaltables sobre techos de automotores en carrera, laberintos literarios representados por oficinas superprotegidas y héroe (heroína) que quedará incógnita, solo con excepción del lector, como una buena narración literaria siempre lo ha exigido.

Ver actuar a Angelina siempre atrae. Una actriz tan polifacética merece el precio de una boleta. Las deficiencias las aporta el narrador. Cuando en la industria del cine se dirige una película, se está escribiendo. Noyce falla con las comas, no utiliza puntos suspensivos, no pone paréntesis y coloca signos de afirmación exagerados. Acá al final, Angelina es todo lo que sostiene con elevada credibilidad a la Agente Salt.

Pastilla y sorbo amargo del METRO en Bogotá


¿Cómo se da la ocurrencia de presupuestar US$66,6 por kilómetro en la construcción del Metro de Bogotá, cuando los últimos costos en el mundo son de US$230 por kilómetro?

La ayuda de la Nación, consistente en US$178 millones anuales ($320.000 millones), entre 2016-2032, asegura US$2.845 millones, y el Distrito debería aportar US$1.220 millones. ¿Para qué? Para el Sistema Integrado de Transporte Público, SITP, es decir, una red organizada con base en Transporte automotriz, Tren de cercanías, Transmilenio ampliado más Metro.

¿Qué pasa entonces si el proyecto Metro vale realmente casi cuatro veces más?

Primero, que Transmilenio y Tren quedan descuidados

Segundo, que el excedente tiene que salir de endeudamiento del Distrito, básicamente debido al mal presupuesto Metro.

El documento CONPES de agosto al respecto lo prevé, da la alarma y la Alcaldía sigue en necia búsqueda del “mandato de los bogotanos a través de las urnas”.

Corolario:

El SITP es una excelente idea, con médula en una línea Metro e irradiación principal 1) de líneas Transmilenio, 2) en buses, busetas y colectivos de transporte público organizados y 3) en tren de cercanías. Esto aparte, como es obvio, de taxi y transporte pirata, que siempre existirá para la periferia y las afueras de la ciudad.

Pero, el Metro no puede representar un 245% (230/66,6) de lo presupuestado, con datos ciertos (no se está significando corrupción ni sobrecostos, sino una realidad). Por otra parte, un proyecto Metro que solo transportará el 4% de los viajes diarios en Bogotá, comparado con 25% de ellos, gracias al Transmilenio, significa que lo que transporta 1/6 de los viajes cuesta, esto es sin equivocaciones que: un pasajero Metro valga 18 veces un pasajero Transmilenio.

El proyecto Metro es interesante tecnológicamente indiscutible, conlleva más de dos décadas de realización, luego de seis décadas de discusión. Pero, si el SITP es la mejor idea en años ¿porqué se vertebra sobre esta soberbia línea de Metro? Podría haber sido sobre una excelente red de Transmilenio, o sobre un Metro aéreo, que no tenga que chocar con la maraña de redes del subsuelo de la capital.

La construcción, digna de postales y negocio gigantesco, conlleva un endeudamiento que rompe con el historial de sanas finanzas del Distrito durante los últimos 20 años contando la administración de Jaime Castro. Esta, la de Castro, meritoria por ser la primera piedra del gran proceso de desarrollo descentralizador y de cambio capitalino.

martes, 17 de agosto de 2010

23 FERIA DEL LIBRO: EL CINE NO ES PARA LEERLO.



Un nuevo paseo por las monótonas ferias del libro lleva a reflexionar una tanto de manera superficial lo que el libro representa en el mundo y frente a un competidor inmediato que es el cine.

CIFRAS DEL LIBRO MUNDIAL

La industria editorial, hay que aceptarlo, es marginal respecto a otras actividades productivas. La demanda de libros no es una de las más importantes en el mundo, pues, con un gran redondeo de datos, Gran Bretaña uno de los primeros mercados del mundo vende unos U$3.000 millones anuales distribuidos en 100.000 títulos. Toda América Latina vende solo US$5.000 millones. Estados Unidos y Canadá U$33.500. Europa, Medio Oriente y África (Israel, Arabia Saudita y Suráfrica solamente, en esta última zona), US$51.500. Asia Pacífico US$27.000. El mundo produce unos US$120.000 millones, en total (PricewaterhouseCoopers, 2009). Esto es un 0,2% del PIB mundial, o mejor el 2 por mil. Colombia puede estar alrededor de US$120 millones en comercio interno y exportación más unos US$30 millones en mercado ilegal del producto literario.

PERSONAJES DEL MUNDO EDITORIAL

Los personajes más famosos en el mundo literario, según The Guardian y la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, son Jesús, Shakespeare, Lenin, Lincoln, Napoleón I, María, Juana de Arco. Músicos como Wagner, Mozart, Beethoven y Bach, en su orden. Picasso, Da Vinci y Miguel Ángel. Darwin, Einstein y Galileo, complementan los primeros lugares, lo cual puede ser un indicador del tradicionalismo cultural en el conocmiento escrito.

INNOVACIONES TECNOLÓGICAS

El tercer milenio comenzó con la pionera publicación de “Riding the bullet” de Stephen King en el 2000, que sólo podía comprarse y leerse en computador con software especial. Ya había comenzado Amazon. com a vender libros físicos por internet. El “Project Gutenberg” se había propuesto a partir d 1971 la idea de una biblioteca universal que luego, en formatos digitalizados tipo HTML, PDF, EPUB, MOBI se comenzó en 1996 y tiene como meta hoy un cerca de 1 millón de títulos. Random House y HarperCollins en 2002, iniciaron la venta de versiones digitales de sus libros impresos. Posteriormente, vendrían los “devices” de lectura con el Sony Reader, el Kindle de Amazon, el Ipad de Apple, y luego todas las nuevas tecnologías tipo e-books en tablets personales o, para acarreo, de la música digital, de las películas blueray, los móviles tipo blackberry, los iPods, los iPhones, los iPads, entre otras muchas innovaciones que permiten transportar libros para lectura en el computador o en ellos mismos.

Pero, quizá, la verdadera revolución que conjuga la problemática de costo del libro impreso con las ventajas de la impresión electrónica es la “Impresión o publicación bajo demanda”, POD, o el “read on time”, servicio que permite satisfacer números individuales por pedido del cliente a cualquier parte del mundo. Una obra conocida o un escrito personal puede ser publicado, impreso y enviado en la cantidad que se desee, desde unidad hasta tirajes tradicionales, involucrando el servicio de promoción por internet, pago de regalías inmediatas (cercanas al 50%) al autor y en proporción directa al volumen de ventas.

LOS TÍTULOS SON LOS QUE VENDEN

“Pecar como Dios manda”, “Santa Suerte”, “Pornotopías”, “Los hombres las prefieren brutas”, “Los hombres son de Marte, las mujeres son de Venus”, “La puta de Babilonia” o los títulos de Paulo Coelho, Walter Rizo, Carlos Cuauhtemoc Sánchez, en autoayuda y que compiten con Stephenie Meyer y su saga de vampiros adolescentes “Crepúsculo”, “Luna Nueva”, “Eclipse” o “Amanecer”; Joanne Kathleen Rowling con títulos atrayentes de las aventuras de Harry Potter, junto a otros muchísimos ejemplos que incluyen a Dan Brown y sus “milagros” besteselleristas, demuestran la influencia primaria de los títulos sonoros.

¿QUIÉNES COMPRAN LIBROS?

Primero, los estudiantes de primaria y básica, es decir sus padres, que adquieren libros de texto que son “obligatorios”. He aquí la más fuerte demanda dentro de este mercado cultural. En segundo lugar, una élite privilegiada y lectora de toda clase de contenidos en los que predomina la literatura novelística y clásica. En tercer orden, el mundo universitario, sus profesores, pues sus alumnos son satisfechos con la ilícita pero muy necesaria fotocopia, restringidos a novedades académicas traducidas o, excepcionalmente, en inglés u otras pocas lenguas extranjeras. En cuarto lugar, los aficionados multicolor que adquieren lo que la inmediatez les indique. Los “bestsellers” parecen tener una ubicación transversal a todos los sectores intelectuales y sociales. Un último lugar, porque existe, hay un mercado del usado, barato, sin pretensiones, que se recicla hasta llegar inútil a los estratos con menor capacidad económica y de criterio.

LOS AUTORES Y EL MERCADO

Un atractivo del mundo editorial son sus divos y divas. Ser autor es un logro social, alcanzar un “habitus” bourdiano. Solo algunos gozan de sus fotos popularizantes a nivel masivo, mientras otros muchos apenas del reconocimiento gremial o del entorno cercano. Este carácter personal hace que el mundo libresco y de la industria editorial se alimente con facilidad de obras paridas con mayor o menor intensidad de dolor, muchas de las cuales con calidad gratuita.

La industria del libro a nivel mundial es muy similar a la industria fílmica internacional. El consumo de países avanzados premia con la recuperación de los costos fijos y el resto del mercado resulta en una suerte de ingreso marginal que permite la intermediación poco dinámica de librerías y la irrigación de esta cultura al escaso lector de países menos bibliográficos (por utilizar algún término).

Una película recupera sus costos en las taquillas de origen en solo un par de semanas. De allí en adelante todo es, en términos económicos, que el ingreso marginal supere positivamente el costo marginal. Es acá donde reside la explicación de la supervivencia de la industria cultural fílmica, o editada e impresa en el mundo. En el caso del cine de autor sucede esto, pues los costos marginales de su producto van siendo recuperados en el itinerario mundial hasta permitir el ingreso que justifique la tarea (Ver Cinetráfico en este blog).

EL CINE FIN JUSTIFICA LOS LITERARIOS MEDIOS

No cabe la menor duda. Con muy contadas excepciones es justificable leer el libro por sobre su versión fílmica.

¿Qué idea justifica tal afirmación? Los libros llevados al cine, actualmente, permiten que la decantada tarea del guión muestre la esencia de su argumento y de su aporte al conocimiento. Es obvio que ello se aplica mejor a crónicas, novelas o cuentos. Hay casos específicos en que libros de otros temas son llevados al formato audiovisual de manera algo exitosa: El Secreto o La Corporación, por ejemplo.

No obstante, frente a la realidad del mundo actual, urgente, rápido, lleno de otros atrayentes intelectuales, la versión fílmica satisface lo que la lectura también. Otra cosa diferente es la primaria escala del aprendizaje lectoescritural que solo lo provee la lectura directa para los no iniciados. O el muy restringido producto teórico investigativo solo presente en la obra académica. Pero en el resto, el cine supera al libro como medio de difusión cultural, en lo relacionado con títulos surgidos en el lenguaje literario.