miércoles, 25 de agosto de 2010

EL ESCRITOR OCULTO (THE GHOST WRITER)



Los créditos

Robert Harris, es un decidido “bestsellerista”, de aquellos cuyo nombre aparece en letras de mayor tipografía que el título de sus novelas. Escribe un nuevo libro cada tres años y sus títulos (Patria, Enigma, Arcángel, Pompeya, Imperio, Conspiración) son sencillos y atrayentes.

Harris escribe “The Ghost”, un thriller político muy cercano a su conocimiento personal y admiración por Tony Blair, exprimer Ministro del Reino Unido (1997-2007) y su esposa Cherie. No siendo una acusación a estas figuras, ni mucho menos, si toca elementos políticos que Harris mismo considera sensibles pues comentó, antes de la publicación, tener temor a mandatos judiciales.

La puesta en escena es del genio Roman Polanski, quien también coproduce y participa del guión. Ewan McGregor (“Star Wars”, “The Island”, “Moulin Rouge”) es el “aparente idiota y algo divertido” que comenta la esposa del político. Pierce Brosnan (junto a Sean Connery y Daniel Craig, uno de los 007 que resultaron inteligentes actores) es Adam Lang, el político que desea ver publicadas sus memorias reescritas por el nuevo “ghostwritter” que reemplaza al anterior, posiblemente asesinado.

Kim Cattrall (“Sex and the City”) es ese bombón de 58 años, la perfecta secretaria eficiente del protagonista. Olivia Williams (“An education”) es la esposa, nada que ver con la caritativa, liberal y socialdemócrata Cherie Blair de la realidad. James Belushi (calvo irreconocible), Timothy Hutton (ganó un Oscar a los 20 años en “Ordinary People”, nada más) los acompañan rápidamente, Tom Wilkinson (“Michael Clayton”, “Cassandra´s Dream”) es un rol clave, pero corto. Eli Wallach, con 95 años de edad, despierta simpatías para quienes lo reconozcan como el Don Altobello de Padrino III o, mucho más, como “Tuco” el feo en “The good, tha bad and the ugly”.
El músico Alexandre Desplat hace bien su tarea (tiene tres nominaciones y dos premiaciones por cada año en toda su carrera).

LA TEMÁTICA

Roman Polansky, francés de ascendencia polaca subjudice por gustar de las jóvenes, lanza cada tres años desde 1965 una película de culto, aunque dirige desde 1955. Es un maestro del lenguaje cinematográfico, sin trucos, sin grandilocuencias, sin pretensiones. Sus películas son inteligentes.

¿Qué hay de Polansky hoy en día? Seriedad en llevar a la pantalla las ficciones. Con el escritor oculto no sorprende, pero gusta. No requiere evolucionar pues, como director, está fuera del bien y del mal. Pero, gracias a Harris, se actualiza y se adentra en una temática que comienza a interesar a la industria cinematográfica: la incidencia de la Corte Penal Internacional.

La CPI es un “cuero de tigre” que, hasta ahora, en consenso 110 países firman pero solo 60 han ratificado. Es una entidad que se usa para argumentar con demagogia por ahora pues solo un par de casos se han hecho realidad, contra los gobernantes de turno. La CPI tiene más cuero que dientes. El Estatuto de Roma, sin embargo, es uno de los ordenamientos del Derecho Penal que más trascendencia ha de tener en el mediano y largo futuro.

En “The Ghost”, Adam Lang es acusado de responsabilidades en la aprobación de vuelos de tortura, de violación de los derechos humanos y crímenes de guerra. Es llamado por la CPI y rechazado por los que fueron sus votantes. La historia lo enjuicia. Pero, ¿cuál es la relación de Lang con la CIA? ¿Es su marioneta política en Inglaterra? Solo después de que las memorias se publican, el escritor oculto lo descubrirá, a través de una estereotipia de codificación que había en el borrador a corregir y … la calle se llenará de hojas sueltas llevadas por el viento.