lunes, 17 de diciembre de 2012

Oscares 2013: LAS MUJERES DEL SEXTO PISO (LES FEMMES DU 6 ÉTAGE)

Philippe Le Guay (“Paris”, “Potiche”), dirige esta comedia romántica francesa interpretada por Fabrice Luchini, Sandrine Kiberlain, Natalia Verbeke, Carmen Maura y Lola Dueñas, con un guión escrito a cuatro manos con Jérôme Tonnerre.
El filme ha sido ganador del Premio de la Audiencia del Festival francés de Los Angeles y seleccionado oficialmente para el festival de Berlin. Carmen Maura se ha hecho merecedora al César por su actuación secundaria, en una historia en el contexto del exilio español de posguerra hacia la vecina Francia, donde se da un intercambio cultural en medio de relaciones desiguales entre las mujeres que solo pueden llegar como domésticas a las casas de ciertos burgueses, como el Sr. Jeaubert (Fabrice Luchini). Su esposa (Sandrine Kiberlain) suple el tedio matrimonial con un esposo ensimismado en movimientos accionarios en bolsa, despidiendo y gruñendo a su doméstica. La argentina-española María (Natalia Verbeke), la joven y hermosa sobrina de una de las empleadas del sexto piso despierta un amor otoñal en el dueño de casa y una tardía conciencia sobre las diferencias sociales. En el reparto las reconocidas Carmen Maura y Lola Dueñas ponen la picardía española al servicio de esta comedia sobre “la pobre bella enamorada de una bestia capitalista con corazón de oro”.

Oscares 2013: EL HOBBIT (THE HOBBIT: AN UNEXPECTED JOURNEY)

“There and back again” de John Ronald Reuel Tolkien, un cuento que ha de cumplir ya un siglo de escrito pareciera ser la precuela de “The lord of the rings”. Pero aún quedará pendiente que Peter Jackson cuente en su buen lenguaje fílmico “El silmarillion”, sobre el nacimiento de estas razas, además de “Los hijos de Húrin” y aparte de lo que ya se están anunciando con “El hobbit: la desolación de Smaug”, pues el dragón Smaug quedó sin explotar su apariencia feroz, y “El hobbit: partida y regreso” que, en conjunto con “El hobbit” han de costar unos US$750 millones que incluyen el mercadeo. Fran Walsh y Phillipa Boyens han sido los buenos intérpretes de las historia de Tolkien hacia guiones de cine y han permitido que, posiblemente, las tres películas iniciales hayan de completar una de las sagas necesarias, desde un enfoque literario, en el campo del cine. US$1.000 millones de recaudo promedio por película justifican cualquier tipo de inversión. Hay un lenguaje excelente en su tratamiento y un papel pionero para la literatura infantil universal en estos personajes de hobbits, elfos, enanos, trolls, humanos y magos.
Bilbo Bolsón, Gandalf, el inefable Gollum, dan indicios de que a la juventud mundial contemporánea se le está ahorrando el esfuerzo lectural por una representación audivisual, lo cual explica que este innumerable mundo de creaturas fantásticas llame tanto la atención en las taquillas mientras que los voluminosos libros se dejan de vender y leer. Con un ánimo reduccionista, se puede vislumbrar una lista larga de indicios sobre la sobre la suplantación intelectual que el cine hace de la literatura. El hecho de que “Harry Potter”, “The hunger games” o “The Twilight saga” estén acompañadas de ediciones físicas en papel no prueba que el mundo lea, sino que un muy bajo porcentaje de compradores de alto poder adquisitivo y buen tiempo disponible compensan los bajos costos de edición, en un universo de marketing engañoso que crea una imagen subliminal de lectura que no existe realmente, aunque los colegios posen pidiendo la compra de estos libros. Muchos dirán que han leído, creerán que lo han hecho, pero ello se debe a la confusión sobre la acción de leer con la de simplemente conocer un argumento. Gran parte del público asistente conforma ese enorme grupo de gente globalizada a través de la transmisión de ejes argumentales e historias, pero analfabetizada frente al lenguaje escrito y, por tanto, muy distante inconscientemente de la ciencia. Cada vez más, todo esto refleja una elitización del conocimiento, quien lo creyera, cuando masas enteras se apartan sin saberlo del dominio lectoescritural, mientras unos pocos inventan, crean, desarrollan y, posteriormente, venden. Ello incluye los libros de ciencia: las áreas profesionales, todas, se alimentan del monopolio desarrollado del conocimiento, vía dominio de sus lenguajes, que hace a países como Colombia, dependientes estructurales del conocimiento.

LA EXTRAÑA VIDA DE TIMOTHY GREEN

Un clásico producto Disney, con una fábula argumental algo anacrónica para un mensaje en apariencia muy humano. Una buena producción oculta la simpleza de la historia. El director Peter Hedges ¿??, y el productor Ahmet Zappa, inventan un cuento y se lo creen tanto como para arriesgar US$40 millones. Quizá, eso si, a sabiendas que el sello de Walt Disney Studios Motion es lo que ayudará a la distribución forzada. El público pagará su boleta para ver cómo crecen las hojas de los pies del poster, de una película con tintes televisivos, nada más.

VACACIONES EXPLOSIVAS (GET THE GRINGO; HOW I SPENT MY SUMMER VACATION)

Adrian Grunberg, siempre director asistente, lleva las riendas del filme en el cual el coguión, la coproducción y la actuación de Mel Gibson son notorias. Gibson tiene talento para el cine excelente y de bajo costo. Este es un filme que no ha de convencer bien, pero innova de toda forma. Se mueve en un espacio pequeño dentro de una cárcel mexicana de frontera (Prisión Fernando Allende), no requiere de escenografías, las cámaras al hombro dan la clásica agilidad de video clip, el personal latino aporta bajos costos.
Hay un intento de obtener altas ganancias respaldadas en el nombre de Gibson y el bajo presupuesto (US$20 millones), tras las ciertas innovaciones técnicas de la realización, pero todo ello no será reconocido por el gran público que rechaza de inmediato aquello que tiene mucho de artesanal.

QUÉ ESPERAR CUANDO SE ESTÁ ESPERANDO (WHAT TO EXPECT WHEN YOU'RE EXPECTING)

Elizabeth Banks, Cameron Díaz, Jennifer López, Brooklyn Decker, Anna Kendrick, Rodrigo Santoro, Rob Heubel, Dennis Quaid, Chris Rock, Chace Crawford, Matthew Morrison, Thomas Lennon, Wendy McLendon-Covey, ofrecen el clásico abanico de caras conocidas para un argumento casual de embarazos, abortos accidentales y partos, frente a unas parejas que ya tienen sus bebés más crecidos. Los machos se feminizan paseando nenés, los novatos no se deciden bien por el desconocido papel de padres y, queda claro, que son las mujeres quienes desean “estar esperando”.
Cameron presenta una reforma de rostro más o menos aceptable, Brooklyn sorprende con su delgadez y estatura aumentada, Jennifer entra en la onda convencional de latina que debe adoptar un chico negro. Chris aporta el humor de la raza y Dennis aparece conservado físicamente como abuelo y casado con una mujer más joven que él, a quien nada le molesta y pasa por la experiencia de madre sin las incertidumbres del resto del reparto. Filme de domingo en la tarde sin mayores aportaciones.

DESPERTAR DE LOS MUERTOS (LA MALDICIÓN DEL ROCKFORD; THE AWAKENING)

Rebecca Hall (“Vicky Cristina Barcelona”) es una actriz de la que se podría decir de manera atrevida que pasa desapercibida. Tiene una actuación plana, pero altamente profesional, lo cual le facilita aportar a esta película la sensación de algo que no sucede sino en su mente. El título del filme anuncia más de lo debido pero menos de lo entregado, pues el distribuidor en Colombia prefiere ofrecer algo de posibles zombies que el buen nombre de “La maldición de Rockford”, que revela el contenido argumental.
Imelda Staunton (“Vera Drake”) aporta la verdadera contraparte y la llave de la explicación de lo que allí pasa. El chico Isaac Hempstead Wright enlaza a las dos actrices, de una manera metafísica que hay que creer para no perderle el sabor a esta película, que no asusta, pero que ofrece un buen suspenso inglés.