martes, 9 de noviembre de 2010

LA SANGRE Y LA LLUVIA (BLOOD AND RAIN)



Mejor Montaje Premio Macondo 2010

Los actores televisivos Gloria Montoya, Quique Mendoza (el excelente “Pochola” de la recordada “La Saga”) y Juan Miguel Silva, actúan como todo actor colombiano al mejor nivel iberoamericano. Los actores son el baluarte de una industria nacional en ascenso, a la cual le faltan historias bien contadas.

Jorge Navas hace el guión, coproduce y dirige, cumpliendo una Ley de Zam. El producto final es un “thriller” bogotano en el escabroso mundo nocturno del centro de la ciudad, en medio de lluvia y alrededor de una venganza en curso. Los protagonistas resultan ser los taxistas y su trabajo de “banda ciudadana” (ayuda a la Policía, vale aclarar). Se destacan los personajes auténticos, el lenguaje prosaico, las claras referencias a las direcciones exactas (carrera 10, 7, circunvalar, ferrocarril, 19…), “La Piscina” y “La Fortaleza, el barrio Santafé. Es Bogotá de noche, como un escenario inexplotado en las historias de los realizadores colombianos. Los “Charles Bukowski´”, por ejemplo Mario Mendoza (“Satanás”), tienen historias que pertenecen a este mundo y no son aplicadas al cine. Se ha hecho con otro producto de Santiago Gamboa (“Perder es cuestión de método”) y se podría lograr con alguna de las novelas cortas de Efraim Medina, en el intento de encontrar lo que falta en la industria fílmica del país: buenos guiones.

Jorge Navas logra precisión en los referentes escenográficos, subculturales y anónimos de la fría ciudad, amplificados bajo la lluvia y con la violencia realista, nada gratuita, que está en las voces diarias de prostitutas, vagabundos, rufianes y habitantes de las calles capitalinas. Con pocos elementos más allá de las cámaras y los “crews” criollos, RCN y sus asociados produjeron una buena cinta nacional en contraste con el regular producto anual de algún competidor suyo. RCN fue exportador de producto audiovisual colombiano desde su inicio como canal y muestra una faceta fílmica de la cual surgieron “Sin tetas no hay paraíso”(?) “El Arriero” (¡) o “Del amor y otros demonios” (¡!), entre otras coproducciones suyas. La noche rebajó costos, la lluvia agregó el clima dramático bien logrado, la sangre siempre ha estado ahí y continúa…